Ser de aquí, de este México que es tan mágico como injusto. Ser de aquí y de tantos otros lugares a estas alturas de mi vida.
Saber que estos sabores, esta gente y estos paisajes son mi esencia. Que estoy hecha de maíz y que mi piel y mis ojos no pueden gritar más fuerte "México" -y estar orgullosa de ello-.
Saber que poner mi vida en una maleta también me ha hecho un poco de allá. De cada otro lugar y de cada otro rostro.