#6

Number 6. Funny even with the language challenges. I don't think it can go any further and I don't necessarily see myself into it, but it was funny nevertheless.

Crystal clear

We first open a window so people can have a look. We then open the door and show all that we are, all that we have. We are crystal clear to them. For a very few: the "lucky" ones.

When opening that door, we show how vulnerable we are, the many things that we are not proud of. We show the complexity of our being. We cry and yell. We laugh and we have fun. Just like anyone else, sure, but not quite like that. A privileged view of oneself and the many demons inside is given to very few people. They see how fragile and how bright our life can be. This, a view with ups and downs (probably more downs tough), is what we give out when in a relationship. Different levels of it, but that's what we give.

Unfortunately this privileged view that we once (or twice) gave, becomes one of the most precious treasures when after some time we realize that it is time to keep it for ourselves. A wide access and view to what we really are is not longer needed after a couple of experiences (mostly bad ones). It becomes enough with the superficial touch and the little conversation and the wide open eyes when something completely irrelevant is being said.

So, let's stay in the surface, I don't think I could survive drowning down again.

Te regalo

Te regalo el mundo entero. Te regalo a todos los millones de personas sobre la faz de la tierra. Te regalo todos los días, todas las horas, la eternidad misma. Te regalo los días soleados, los días de nieve, los días lluviosos y los de viento también. Te regalo cada café del mundo, todos los restaurantes que quieras. Te regalo los paseos más hermosos, los bosques más verdes, las playas más soleadas, los paisajes más nevados. Te regalo las más hermosas sonrisas, los ojos más misteriosos o alegres.

Te regalo todo lo que quieras y espero que después de todo lo ofrecido, puedas construir recuerdos memorables, instantes que duren una eternidad en tu memoria. Porque esos serán las pruebas de tu paso por este mundo.

Jet lag

Grey skies, summer toasted skins, jet lag and whatever is left of the summer. Back in Brussels. Sleeping a lot, trying to get into the rhythm again. 37. Gym and French lessons to come again. Exhausted with a long list of to do things by the end of the year at work. This country of strange people (including myself). For now wondering where am I and which way this life is going other than just by chasing the next year.

Lo que queda...

Y así es como termina la historia.

Cansada

Siempre que estoy en México me siento más cansada que cuando estoy en Bruselas. En México no trabajo, pero casi nunca paro.

He visto a amigos y familiares. He resuelto cosas y ayudado a resolver. Cuando estoy aquí soy como siempre: la mamá chiquita de mis hermanos y hasta de papá. No me molesta, pero pasa y me doy cuenta de ello. Ojalá tenga siempre en mis manos una forma de ayudarlos.

También, cuando estoy en México, me doy cuenta de que aún no quiero regresar y me pregunto si algún día lo haré. No lo sé. Es probablemente una de las preguntas más difíciles que la gente me hace.

Algunas personas aún hablan de mis últimas relaciones y preguntan qué pasó. Para mi son cosas tan distantes ya... Yo me pregunto otras tantas cosas acerca de mis relaciones, pero concretamente de las de amistad. Me pregunto si estando tan lejos, las personas que me significan, las que creo conocer (y que me conocer mejor), seguirán ahí, para mi, cada 6 ó 7 meses.

Ultimamente tengo ese miedo. Pienso en aquello de "Santo que no es visto, santo que no es adorado" y me pregunto si mis amigos de tantos años seguirán queriendome, si aun les importan las cosas que me pasan y si en general les importa qué es de mi.

Mi ciudad cambia, pasan tantas cosas en el lapso de 6 meses y al mismo tiempo todo sigue igual (y algunas cosas inclusive empeoran). A veces no la reconozco y quizás ella tampoco me reconozca a mi.

Starbucks Gante

Hoy estuve en el centro. Pasé por algunos lugares de la primera vez y de alguna otra ocasión que fuimos juntos. Primero la zona de las lámparas y ese estacionamiento en el que creo que estuvimos dos veces. Comí con mi hermano en el Mercado de San Juan y la pasamos muy bien (era un lugar que no conocía).

Después caminamos en la zona que me trae muchos recuerdos de la primera vez. Hasta ahí todo bien. Creo que he podido procesar y superar todos esos recuerdos. Sin embargo esta vez algo se rompió cuando pasé por la esquina de Gante y Madero y me di cuenta de que el Starbucks ya no existe. Qué sensación más extraña. Es como si hubieran borrado de la faz del centro EL LUGAR. Es como si el destino y la historia de ese lugar se hubiera borrado a consecuencia de nuestra propia historia. Es como si todo se alineara. Desaparecieron un pedazo de mi corazón.

Fue como un balde de agua fría. Tuve que acercarme y asomarme a traves de la ventana y ver el lugar abandonado, vacío. Caminé y volví  para mirar otra vez el local vacío. Vacío de mobiliario, sin los logotipos, sin la gente, sin sus mesas, sillas y sillones. Sin ti y sin mi.

Estuve pensando en estos últimos días en cómo a pesar de pasear por lugares compartidos, me estaba sintiendo en mi lugar, pero ver ese local vacío fue como un golpe, uno muy duro. Supongo que es una coincidencia, pero una que me hace pensar que hasta las cosas externas a nosotros confirman que la historia tenia que ser como fue y/o es.